lunes, 4 de junio de 2012

Pero ha pasado tanto tiempo desde aquello que pienso en qué momento comenzó todo, en qué momento caí en esa trampa que podría decir que hoy en día me tiene aún a su red. Pensar en qué podría haber pasado  si ahora estuviera sin ti, pensar en si te hubiera olvidado justo como pensé que haría cuando nos alejamos.
Y la verdad es que volvería tantas veces a esos meses que ni siquiera dejaría pasar ni un segundo. Pero una de las cosas que he aprendido de todo esto es que por más de que quiera volver 17 meses atrás las cosas que han pasado ya no volverán a suceder, y que si un día te tuve tendría que haber sabido que poco después ya no lo iba a hacer. O pensar que una de las cosas que tiene el tiempo es que lo vivido vivido está, y que a partir de aquí lo que tenga que pasar pasará.
No sé con certeza qué nos pasará dentro de días, meses, incluso años. Ni siquiera sé qué será de todo ésto mañana. Lo único que sé por ahora es lo que quiero, y lo que tendrías que saber tú es que no me rindo tan fácilmente. Y que si tengo que hacer algo para que te quedes aquí conmigo haré hasta lo imposible.
Que si estás mal ahí estaré yo, mirándote desde arriba y cuidándote. Abrazándote cuando más lo necesites y besándote hasta hacer que cada célula de tu cuerpo se calme. Y que cada vez que me quieras encontrar tú solo toca tu pecho, siente como late tu corazón. ¿Oyes mis pasos? Estoy ahí, y no permitiré que te pase nada.
No nos dejaré ir, no esta vez. Te lo prometo.


1 comentario: